Tengo que reconocer que últimamente me he llevado con usted alguna decepción, como leyes de ordenación urbana o discursos feministas-istas-istas retrógrados y fáciles. Le voy a conceder una nueva oportunidad:
Ésto ocurrió en 1981Nadie tiene por qué saber que le he dado la idea. Existen varias maneras de enfocar el asunto. En ambas se va a enfrentar a esa suerte de sindicato vertical que forman los sindicatos de clase con Telemadrid. Ni que fueran trabajadores del acero, oiga.
La Administración Reagan, tal y como prometió el pasado lunes envió ayer miles de cartas de despido a parte de los 12.172 controladores (el colectivo reúne a 13.000) que desde aquella fecha permanecen en huelga.Al tiempo, la Administración Reagan ha puesto en marcha un plan de emergencia diseñado durante el mandato del ex presidente Carter, que consiste en el empleo de personal militar en las consolas de control, la reducción a la mitad de los vuelos regulares durante el próximo mes en veintidós aeropuertos de las principales ciudades del país y el cierre de 58 torres de control en distintos puntos del país para permitir el servicio de unos 1.000 controladores en zonas más necesitadas.
Asimismo, el presidente norteamericano anunció que se habían recibido 25.000 peticiones de trabajo para los cargos que los controladores. están dejando vacantes. Según la Administración, se podrán entrenar en un año 6.500 nuevos controladores, quienes, junto a los 9.000 que actualmente poseen el título y no están, en funciones, pueden reemplazar la fuerza laboral que hoy pelea por sus reivindicaciones.
La primera es estilo Ronald Reagan, fulminar a los ociosos trabajadores de Telemadrid y reemplazarlos. Es quizá más popular que la segunda, pero para llevarla a cabo hay que asumir que la televisión pública es efectivamente un bien común que hay que conservar y que la sociedad hace bien endeudándose para financiar Telemadrid.
La segunda es, por tanto, cargarse Telemadrid. Sí, sin duda sería prescindir de un instrumento de propaganda al que nadie renuncia en su comunidad pero podría presumir de ser la primera sin temer nada además (la FSM.. por favor).
Acabo con otro chiste, esta vez sobre los sindicatos:
El secretario confederal de acción sindical de UGT, Antonio Ferrer, afirmó hoy que las previsiones anunciadas por el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, situando la tasa de paro en 2009 próxima al 11 por ciento, son un "buen ejercicio" por parte del ministro, pues plantea alternativas y respuestas para mejorar "el sistema productivo" y "el sistema de producción social".