martes, enero 31, 2006

Charnego

Recuerdo que cuando el equipo de mi pueblo jugaba en Segunda B contra la Gramanet, algún descerebrado de esos que se habían bebido medio sueldo en cognac se acercaba hasta el túnel de vestuario y, especialmente si habíamos ganado el partido (aunque no era condición sine qua non), gritaba un "¡¡¡Andaluz!!!" a cualquiera de aquellos rojillos (sin acritud) que probablemente era un catalanísimo futbolista de pura cepa cuyo nombre era Oriol Brotons.

Y yo me reía. Qué venga la CAC. Me repugnaba el escupitajo que se llevaba el jugador en la cara si se le ocurría contestar, pero eran los menos y además yo era un chaval. El fútbol en directo es un circo romano. Incluso hubo algún tiempo en que no me avergonzaba de haber nacido en Lérida. Desde que la De Madre nos explicó el orgullo que uno sentía al rebautizarse como catalán no había vuelto a pensar en ello,

Pero, ay Montilla, Montilleta para los de allí, que no te quieren. Y encima te acusan de charnego. Además te lo dice Sevilla: "es cojonudo para mil cosas, pero es muy pronto para un 'charnego'". Dios, qué doloroso. ¿Puede sentirse uno más impotente que cuando se ve sentenciado por un apellido que no eligió? Y encima con lo que Montilla ha hecho por Catalunya. Estoy cansado, terriblemente cansado (como en Alguien voló sobre el nido del cuco) de políticos de perfil tan insultantemente bajo.

charnego, ga.

(Del cat. xarnego, y este de lucharniego).

1. m. y f. despect. Cat. Inmigrante de una región española de habla no catalana.


Real Academia Española © Todos los derechos reservados


El "despect." querrá decir despectivamente, no se devanen los sesos. Me veo incapaz de ejecutar una nueva predicción. Me importa un carajo, él se lo ha buscado por elegir a "los malos".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Augie, lo de charnego no está mal, pero siempre he preferido lo de maketo. Gero arte.