lunes, octubre 10, 2005

Lunes 10 de Octubre

He ido a beber una Paularner a mi rrlandés favorito y he cogido en el mismo "La Razón", hacía meses que no leía este periódico.

En el tránsito a la página de ese Cabrera Infante español que es Tomás Cuesta (mejor) me he encontrado:

Entrevista a Fraga. Entre otras cosas le preguntan qué hará al acabar la legislatura. Con dos cojones don Manuel dice que necesita dedicar tiempo para el tránsito a la otra vida. ¡Impresionante lucidez! La vida esta llena de Hyman Roth's, en contraste. Hyman Roth es un viejo mafioso de El Padrino del que dice Michael Corleone (Al Pacino): "Hyman Roth está muy enfermo y siempre habla de su muerte. Pero él no cree que vaya a morir. Es muy ambicioso y cree que nos sobrevivirá a todos". Pues eso, que da gusto ver que hay alguien que no espera sentado a la muerte deseando que a la dama de la guadaña se le olvide. Y la espera activamente. Es triste pensar que a sus más de 80 años no había quién le sucediera. Y que ganó las elecciones, aunque no gobierne. Y nuevamente el refranero: "Pablo se casó en Segovia, cojo tuerto y jorobado; cómo sería la novia...".

Gabriel Albiac con su recomendable columna, como siempre. Nos habla de Mojamé. el detestable y criminal rey de Marruecos.

Más adelante explican en una doble página la intención de las declaraciones de Ibarra contra el Estatut. Se ve que el "bellotari" la está montando con un polígono que no sólo no va a dar los puestos de trabajo para los que estaba destinado sino que es contaminante hasta tal punto que PP e IU (sí, están leyendo bien) se han unido en la oposición.

Alfonso Ussía no me cae demasiado bien. Pero hay que reconocer que en su artículo sobre la susceptible eliminación de España en el Mundial a manos de Botswana se sale. Adelanta las excusas, las declaraciones... de Luis Aragonés, entre otros: "Hay que reconocer que no hemos sabido parar a Bolombolo".

Por fin llegamos a Tomás Cuesta. Nos habla de futbol, de su señora, de Gracián, de Alonso, de Telepizza y acaba el artículo dejándonos con una sonrisa.

Incluso al final hay una breve entrevista con Berlanga, el más egregio erotómano y fetichista de entre los españoles.

Al volver a casa me ha caído ladediós encima. Creo que la última vez que salí a pasear bajo la lluvia todavía era joven. Hoy me he calado hasta los huesos. Era cuestión de esperar, alguna vez tenía que llover.

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