sábado, octubre 29, 2005

Una tranquila historia de violencia

SINOPSIS

Tom Stall (Viggo Mortensen) lleva una vida feliz y tranquila con su mujer –abogada (Maria Bello)– y sus dos hijos en la pequeña ciudad de Millbrook (Indiana) hasta que una noche su existencia idílica se ve destrozada cuando frustra un violento intento de robo en su restaurante. Tom percibe el peligro y salva a sus clientes y amigos matando en defensa propia a dos criminales buscados por la justicia. Aplaudido como un héroe, la vida de Tom cambia de la noche a la mañana y de repente se encuentra convertido en el centro de atención de todos los me-dios de comunicación. Incómodo con esta fama no buscada, inten-ta volver a su vida normal, pero un hombre amenazante y misterio-so (Ed Harris) llega a la ciudad para enfrentarse a él porque cree que Tom es el hombre con quien tiene una cuenta pendiente del pasado. Mientras Tom y su familia luchan contra este error de iden-tificación e intentan afrontar la transformación de sus vidas, se ve-rán obligados a plantear sus relaciones y los temas que les dividen.

Dirección: David Cronenberg.
Países:
USA y Canadá.
Año: 2005.
Duración: 96 min.
Género: Thriller, drama.
Interpretación: Viggo Mortensen (Tom Stall), Maria Bello (Edie Stall), Ed Harris (Carl Fogarty), William Hurt (Richie Cusack), Ashton Holmes (Jack Stall), Stephen McHattie (Leland Jones), Heidi Hayes (Sarah Stall), Greg Bryk (William "Billy" Orser), Peter McNeill (Sheriff Sam Carney).
Guión: Josh Olson; basado en la novela gráfica de John Wagner y Vince Locke.
Producción: Chris Bender y J.C. Spink.
Música: Howard Shore.
Fotografía:
Peter Suschitzky.
Montaje: Ronald Sanders.
Diseño de producción: Carol Spier.
Vestuario: Denise Cronenberg.
Estreno en USA: 23 Septiembre 2005.
Estreno en España: 21 Octubre 2005.



Por primera vez en muchos años asistí al momento tan especial en el que palomiteros, adolescentes con ganas de magreo, cinéfilos, cinéfagos y espectadores eventuales se unen para abuchear a la cabina de proyección toda vez que la imagen sobresale en un 50% por los límites superior e inferior y se ha convertido el Cinemascope en "Cinemaspeque".

Al poco de comenzar nos encontramos con el primer golpe de violencia protagonizada por dos delincuentes, que ocurre en el fuera de cámara. Cambia la escena y se nos presenta a la familia de Tom Stall. La arquetípica familia americana, que tantas veces se ha visto descrita en el cine. Desayunan plácidamente. A continuación vemos a Tom (Mortensen) dirigirse a su trabajo como dueño de una cafetería. Millbrook es una ciudad pequeña, alejada de las carreteras que conectan las grandes ciudades. Desde el civismo inicial del que hace gala Tom tenemos claro que es una ciudad endogámica, la América rural. Los habitantes se conocen, cualquier elemento exógeno es directamente detectado y comunicado al sheriff de la ciudad, que tiene contacto con todas las familias. Se nos va anticipando el material a la vez que se nos prepara para lo que venga.

Tom y Edie se nos antojan ñoños e incluso empalagosos. Ella es abogada, le lleva a él en coche y toma la iniciativa en las relaciones sexuales. Tom y Eddie tienes dos hijos: el adolescente Jack y la niña Sarah. Jack tiene problemas con compañeros de clase que le hacen la vida imposible. La pareja de criminales lleva a la cafetería de Tom y se produce el atraco frustrado (fantástica escena). A partir de allí se desencadena la violencia.

No es una violencia explícita y gratuita (nada que ver con "Asesinos Natos" o subproductos así) sino que las situaciones llevan a todos los personajes a la violencia como única salida. Podríamos decir que es una violencia "tonal", que pone el color de fondo a todas las secuencias. Incluso las escenas de sexo tienen ese tono. Cada episodio de violencia va convirtiendo a los personajes. Ya no son tan planos como se nos habían presentado. Ni sus relaciones son las mismas, ni lo serán más. El sheriff dice a los visitantes de Millbrock que se alejen del pueblo; luego hará la vista gorda con Tom en aras de la tranquilidad de la comunidad.

Y hasta aquí puedo leer. Quien quiera saber más tendrá que verla.

Ed Harris y sobretodo William Hurt están espléndidos. Mortensen lo hace muy bien, Maria Bello es la única que no acaba de estar a la altura. La mezcla de fotografía, música y montaje funcionan de maravilla. La música de Howard Shore es esencial. Lejos de estar al servicio del impacto y las emociones fáciles, la música sustituye al monólogo interior de los personajes. Todas las escenas de transición llevan la música como línea directriz. No sólo anticipará las emociones sino que unida al montaje estará al servicio de explicarnos el texto. Eso facilita que se dé un ritmo distinto al esperado, nos da la sensación de "yo ya había visto esto pero nunca me lo habían contado así", frase que serviría si tuviera que razonar mi consejo de ver la película.

1 comentario:

John Self dijo...

No he visto la peli. Me cuentan que no parece un película de Cronenberg. Me parece que tu post lo confirma en parte. Porque en Cronenberg todos acaba siendo putrefacción y descomposición. Mi novia es incapaz de soportar "Inseparables". A mí, dicho sea de paso, me parece una obra maestra. Con Cronenberg, me quedé en "Existenz" y sus vainas biónicas para acceder a la realidad virtual (mental9 de cada uno. Las pajas mentales ya me las sé hacer yo. Irá a ver esta última.